La guía de la Vitamina B12 ¿Debo tomarla?

La vitamina B12 es una de las sustancias indispensables para que el organismo se mantenga en perfecto estado de salud. Su administración afecta desde la síntesis de ADN hasta la creación de células sanguíneas y sistema nervioso, por lo que ante una deficiencia es aconsejable la suplementación. Descubre a continuación qué es, cómo se consume, los beneficios y efectos que posee en el organismo.

¿Qué es la vitamina B12?

Se define vitamina B12 como un tipo de vitamina hidrosoluble, es decir, que se disuelve en el agua y que interviene en la formación de la sangre y neuronas. Al ingresar al cuerpo, este utiliza las cantidades necesarias y el resto lo desecha en la orina. Sin embargo, el hígado cuenta con la capacidad de crear grandes reservas de esta sustancia, que dura entre tres y cinco años.  

Dentro de sus funciones se encuentra la de apoyar el metabolismo de las proteínas, en conjunto con otras vitaminas del complejo B. Favorece la formación de ADN, el material genético de las células, previene enfermedades como la anemia y contribuye al mantenimiento del sistema nervioso.

Beneficios de la vitamina B12

La vitamina B12 o cobalamina se prescriben en caso de que el organismo evidencie una falla en las reservas de esta sustancia en el hígado, acción que tarda unos años en aparecer. Al empezar el consumo, en forma de suplementos o en la alimentación, se puede aprovechar los siguientes beneficios:

• Reduce y previene la anemia: Hay personas que tienen problemas para absorber la vitamina B12 de los alimentos, por lo que requieren suplementación. De esta manera, estimula la producción de sangre y energía, previniendo las enfermedades por falta de este nutriente.
• Contribuye a evitar la depresión y ansiedad: Al tener un efecto sobre el sistema nervioso, un correcto tratamiento con esta vitamina ayuda a evitar episodios de ansiedad y depresión. Estudios demuestran que quienes poseen esta condición, los niveles de vitamina B12 son bajos.
• Ayuda a mejorar la salud de la piel: Al tener efectos en el sistema nervioso, metabolismo celular y creación de células, regula la cantidad de pigmentos que se produce en la dermis. Por ello, un consumo adecuado ayuda a tener una piel libre de manchas.
• Mejora la condición muscular: El funcionamiento bioquímico de la vitamina B12 está asociada a la regeneración de los nervios dañados y control de la sensación de dolor. Por tal razón, sirve de ayuda en casos de inflamación y dolor muscular.

Además, se mantiene en el organismo por un período de tiempo extenso, ya que el hígado tiene la capacidad de crear grandes reservas y es de fácil acceso. Son muchos los alimentos que poseen cantidades excepcionales de este nutriente, siendo los principales las carnes.

¿Cómo se toma?

La suplementación a base de vitamina B12 es segura en la mayoría de los casos, ya que una gran cantidad proviene de los alimentos. Sin embargo, existe un grupo que no puede aprovecharlo por alteraciones en su capacidad de absorción, por lo que se recomienda:

• En lactantes de hasta 12 meses 0.4 – 0.5 mcg/día.
• Los niños de entre 1 y 13 años, pueden consumir entre 0.9 y 1.8 mcg/día.
• Los adolescentes y adultos se favorecen con una dosis de entre 2.4 y 2.8 mcg/día. Las embarazadas y lactantes pueden incrementar la dosis bajo supervisión médica.

En cuanto al tipo de suplemento, se pueden usar aquellos en forma de jarabe, inyección y hasta gel nasal. Además, hay suplementos que se aprovechan de forma sublingual y hasta en forma de parches, lociones y más.

Efectos secundarios de la vitamina B12

Esta vitamina es una de las más seguras que existen, incluso cuando se toma en exceso, pues el cuerpo la excreta por medio de la orina. Sin embargo, mientras se elimina el exceso de vitaminas del organismo, el paciente puede experimentar dolor de cabeza, náuseas, sensación de hormigueo en las manos y en los pies.

En otras personas, se puede desarrollar erupción cutánea, urticaria, insomnio, palpitaciones cardiacas y ansiedad. La mayoría de estos efectos se deben más a los componentes de la fórmula de la inyección, que al exceso de la misma vitamina. Por ello, la dosis adecuada siempre será la que indique el profesional de la salud, tomando en cuenta la condición del paciente.